10 feb 2014

ABC DIARIO - SALVEMOS AL TEJU DE LA RESOLUCION DE LA SEAM

10 de Febrero de 2014

 

Desmienten a ministra y a Guyra Paraguay

FILADELFIA, Chaco (Marvin Duerksen, corresponsal). El cupo de pieles del teju guasu en Argentina “fue cero en el 2006 al igual que en los años 2008 al 2013”, coincidieron en señalar Thomas y Sabine Vinke, de Paraguay Silvestre, quienes desmintieron así de que los cupos para el teju durante casi todos los años fueron de 300.000 cueros en Paraguay, mientras que en Argentina el cupo es de 1.000.000 de cueros, desde hace 20 años, según señalaron la ministra del Ambiente, Cristina Morales, a Radio Ñandutí, y la organización ambientalista Guyra Paraguay, en un comunicado difundido el sábado último.
Tito Aduguede Cutamurajai
Tito Aduguede Cutamurajai / ABC Color
Los Vinke aseguran que las cantidades de exportación se redujeron dramáticamente en los últimos 20 años, lo que implica una alternativa: o la reducción significante de las poblaciones o la reducción significante del interés del mercado.
Si la reducción se debe al bajo interés del mercado, entonces la matanza de los animales es innecesaria. En cambio, si es cierta la primera posibilidad, significa que la cacería no era sustentable en Argentina, cuya superficie es mucho más grande, según los entrevistados.
Por otro lado, recordaron que en relación al Programa Nacional de Manejo del Teju Guasu, presentado ahora por la Secretaría del Ambiente (Seam), y que sirvió como base para la actual licencia de cacería de 214.000 teju, se trata de un monitoreo que se hizo entre los años 2002-2008, para evaluar si la exportación de unos 200.000 animales en aquel entonces afectaría a la población. El monitoreo determinó que entonces no habría impacto negativo para los animales. Sin embargo, y en base a este resultado, se elaboró la actual licencia, sin tener en cuenta los cambios que experimentó el Chaco en los últimos años.
Ayoreos se quejan de la baja paga que reciben
Ayoreos de la comunidad Ebetogue, a 35 km al norte de esta ciudad, aseguran que están cazando teju para el acopio de sus pieles, después de que “un paraguayo de Asunción” apareció en la comunidad ofreciendo la compra de las pieles.
Se quejaron que solo se les paga G. 10.000 por unidad.
“Este precio no alcanza. No nos ayuda en nada. Ellos se aprovechan de nuestras tierras y nosotros no recibimos casi nada”, sostuvo Tito Aduguede Cutamurajai, presidente de la organización Asociación Tiegosode Uejai.
Dijo que un grupo de ayoreos se trasladará a la Seam para protestar por el bajo precio que perciben por las pieles y exigirán se les pague entre G. 50.000 y G. 100.000 por unidad de piel.
Durante el último acopio oficial otorgado por la Seam, hace más de 10 años, los indígenas cobraban el mismo precio (G. 10.000), mientras los acopiadores vendieron los pieles por más de G. 300.000 la unidad.
Teniendo en cuenta estos precios y la actual licencia en cuestión, el beneficio total para los vendedores (normalmente indígenas) de pieles de teju sería de G. 2.140 millones, mientras los acopiadores cobrarían G. 64.200 millones; un espléndido negocio redondo.
El monto puede ser mayor, según el precio del mercado internacional.

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Medio Ambiente

El medio ambiente debe ser considerado como parte integral y armónica del conjunto de tareas que garanticen el desarrollo sostenible de un país como Paraguay (Molinas 2006).

El problema de la sostenibilidad es en el fondo un problema de desarrollo, de erradicación de la pobreza, de educación colectiva, de mentalidad y hábitos sociales, de cultura política, de mecanismos institucionales que incorporen la participación de la sociedad civil en la toma de decisiones, de nuevas formas de producir y de consumir, de equidad y cooperación en las relaciones internacionales, se trata, en suma, de colocar al ser humano en el centro de nuestras preocupaciones, porque si las personas no están protegidas, la naturaleza tendrá, entonces, pocas oportunidades.

Para avanzar verdaderamente hacia el desarrollo sostenible debemos asumir nuestra responsabilidad local con enfoque global en la lucha que la humanidad esta encarando por preservar en el largo plazo los ciclos vitales de la vida de los que depende la existencia misma del ser humano sobre la tierra, debemos hacer un esfuerzo local con perspectiva global (Molinas 2008).

Anuncio Ing. Alfredo Molinas