Este análisis técnico como Asesor Agroambiental de la Unión de Gremios de la Producción (UGP) se realizó conforme la presentación del documento sobre la “AGRICULTURA SOSTENIBLE DE PARAGUAY” elaborado por el Dr. (M.Sc.) (M.Pa.) Marcos Medina y el Ing. Agr. (M.Sc.) Ken Moriya en Noviembre del 2020; con el objetivo superior de este análisis es poner en puesta en valor a como el Sistema de Siembra Directa (SSD) ha venido y viene contribuyendo a que los “Sistemas de Producción Agrícolas Convencionales” sean cada vez mucho más sustentables en el Paraguay.
Sistema de Siembra
Directa (SSD) en la Agricultura Familiar Cultivo de Poroto con los Abonos
Verdes
La producción agropecuaria y
forestal paraguaya ha venido en estas 3 (tres) últimas décadas mejorando
sustancialmente en la producción y productividad por consecuencias de la mejor
eficiencia en el uso y manejo cada vez más racional de sus recursos naturales
ecosistémico. Estos uso y manejo más eficientes de los recursos naturales ha
venido generando un proceso de “CAMBIO y ADAPTACIÓN” de nuestros
sistemas de producción tradicionales y/o convencionales a sistemas de
producción mucho más tecnificados y cada vez más sustentables.
Las causas principales de estos “CAMBIOS
y ADAPTACIONES” de los sistemas de producción tradicional y/o convencional
para el uso agrícola, pecuario y/o aprovechamiento forestal en el país, está
ligados directamente por mantener la capacidad productiva del recurso natural
productivo “SUELO” y los desafíos de controlar la vulnerabilidad que sufre nuestras unidades productivas de la
Región Oriental y la Región Occidental o Chaco, específicamente por los efectos
perjudiciales causados por el cambio climático global como son actualmente: las
intensas precipitaciones, las heladas extremas, las temperaturas extremas, los
vientos intensos y las granizadas extremas y poco previsibles.
En este proceso productivo de “CAMBIOS
y ADAPTACIONES” de los sistemas de
producción agrícola, pecuarios y forestales en la Región Oriental han venido
incorporando las “Buenas Prácticas Agronómicas” identificados como: la siembra
directa, la rotación de cultivo (con abono verde y otros rubros como soja,
maíz, poroto, sésamo y abono verde de invierno como la avena), curvas a nivel,
subsolado para romper el pie de arado en los suelos, manejo integrado de plagas
(MIP), y el uso de variedades mejoradas de alto rendimiento, resistente al
ataque plagas y enfermedades, así como tolerantes al calor extremos y las
sequias producto de la biotecnología.
Es importante indicar que nuestra
condiciones edafoclimáticas en la Región Oriental del Paraguay a diferencia de
otras regiones productivas, con la adopción tecnologías innovadoras y técnicas
de la producción comprobadas, se realizan 5 (cinco) cultivos agrícolas en un
periodo de 2 (dos) años en la misma área de siembra; 3 (tres) de estos cultivos
agrícolas son de renta y dos de ellos para recuperar y mantener la capacidad
productiva de estos suelos, contribuyendo así con la optimización del recurso
productivo “SUELO” y convertir a nuestros sistemas de producción
agrícolas en armonía con la naturaleza.
En tanto que en las unidades
productivas de la Región Occidental; los sistemas de producción convencionales
agrícolas, pecuarios y forestales también con sus “CAMBIOS y ADAPTACIONES” vienen incorporando las “Buenas Prácticas
Agronómicas” como son: manejo de los recursos hídricos, siembra directa,
rotación de cultivo, época de siembra, barbecho químico, manejo integrado de
plagas (MIP), selección de especies y variedades adaptadas a la zona,
ordenamiento predial en base a la capacidad agrológica del suelo, cultivos de
cobertura, uso de abonos verdes y cultivo perpendicular a la dirección del
viento, nivelación del suelo, y Manejo Animal y el no uso del fuego.
Pero al hablar actualmente a nivel
internacional de la “AGRICULTURA PARAGUAYA” es más que reconocida para
propios y extraños como un modelo exitoso de la denominada “Agricultura de
Conservación” especialmente la practicada en la Región Oriental Paraguay;
hecho ratificado con las publicaciones que viene realizando la Federación
Paraguaya de Siembra Directa para una Agricultura Sustentable (Fepasidias), donde
se “Destaca que nuestro país ocupa un lugar privilegiado a nivel mundial en
cuanto a la agricultura de conservación, donde se destaca que entre el 90% y
95% de la superficie de los cultivos está cubierta con el Sistema de Siembra
Directa (SSD) es decir sembrar sin arar, lo que ha permitido mejorar
significativamente la productividad y rentabilidad de los rubros como la soja,
el maíz, el trigo, entre otros y otorga además grandes beneficios económicos,
sociales y ambientales”.
Dia de Campo con Aplicación de Cal Agrícola con el
Sistema de Siembra Directa (SSD) de la Agricultura Familiar
Una fecha histórica en la “AGRICULTURA
de CONSERVACIÓN” paraguaya es la fecha del 05 de Octubre de 1993 porque
se había creado y lanzado oficialmente en el país el “Programa Nacional del
Sistema de Siembra Directa (SSD)” por el Ministerio de Agricultura y
Ganadería (MAG) y la Agencia de Cooperación Técnica Alemana – GTZ, arranco con
un convenio que inicio impulsando una “Alianza para la Siembra Directa”,
todos estos hechos fortaleció las acciones conjuntas entre el Sector Privado,
un Organismo Internacional y el Sector Público de la “Agricultura de
Conservación” que en la década del 90.
El producto del “Programa Nacional del Sistema de Siembra Directa” esta “Alianza para la Siembra Directa” que arranco en el año 90, ha permitido logrado el aumento de la productividad del casi el 100% y de la producción de más del 769%, es decir, se septuplico la producción por la optimización y eficiente en el uso y manejo más racional del recurso natural productivo “SUELO”.
Figura N°1: Evolución del
Área de Producción y sus Rendimientos (Periodo 1970 al 2015)
Fuente: Cámara Paraguaya
de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas - CAPECO
Esta optimización y eficiente en el uso y manejo más racional del recurso natural productivo “SUELO” se logró con la “Aceptación y Adopción” en los sistemas de producción de las “Buenas Prácticas Agronómicas” como ser la rotación de los cultivos, las curvas a nivel, el subsolado, el manejo integrado de plagas, la adaptación de tecnologías como es la mecanización, el uso de variedades mejoradas y producto de la biotecnología moderna y la agricultura de precisión, todos ellos contribuyendo satisfactoriamente en evitar la necesidad de expandir la frontera agrícola o modificar el uso agrícolas de la tierras en igual proporción, permitiendo de este modo a contribuir a la conservación de áreas de los remantes de bosques nativos.
Figura N°2: Evolución de la
Producción del Complejo SOJA (Últimos 23 Años)
Fuente: Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas - CAPECO
La “Aceptación y Adopción” en los sistemas de producción de las “Buenas Prácticas Agronómicas” en el modelo de sistema de producción tecnificado que logró septuplico la producción en un periodo de 23 años donde: Soja de 1.800 Ton en 1993 paso 9.200 Ton en el 2015; Maíz de 462 Ton en 1993 paso 5.070 Ton en el 2015; y Trigo de 425 Ton en 1993 paso 1.147 Ton en el 2015. Especialmente por la optimización y eficiente uso y manejo del recurso natural productivo “SUELO”.
Un punto importante a considerar es que la “Agricultura Paraguaya” sé que se caracteriza actualmente por tener una “Estructura Productiva Bi-Modal” como ser: la “Agricultura Familiar” que se caracteriza por un sistema de producción de bajo nivel tecnológico y diversificada, con mano de obra familiar y de pequeña escala, producen el 85% de los productos de la canasta básica familiar del país; y la “Agricultura Tecnificada” que se caracteriza por tener un sistema productivo altamente competitivo, con alto nivel tecnológico, generando productos de buena calidad y rentabilidad, con muy buena inserción en los mercados nacionales y de exportación.
Al describir como el Sistema de Siembra Directa (SSD) son aplicados en la “Agricultura Familiar” y la “Agricultura Tecnificada” estamos hablando de aplicar en los sistemas de producción la “SUSTITUCIÓN” en la preparación de los suelos para la remoción usando los arados y rastras (responsables o causantes de la erosión hídrica que reduce la fertilidad natural de los suelos y además colateralmente genera por la sedimentación de los suelos la contaminan los cursos hídricos), por la “ROTACIÓN” de cultivos con el uso de abonos verdes como cobertura permanente de los suelos y con el aprovechamiento de los rastrojos del cultivo anterior, sobre las cuales se realiza la siembra con maquinarias especiales e innovadoras para el efecto.
Sistema de Siembra Directa (SSD) con Maquinarias Especiales
e Innovadoras de la Agricultura Tecnificada
Como resultado de todo este proceso tecnológico podemos aseverar que básicamente el Sistema de Siembra Directa (SSD) en nuestro país se sustenta en 3 (tres) pilares como: la no remoción de los suelos agrícolas; el uso de abonos verdes como cobertura de los suelos; y la rotación de los cultivos. Además el Sistema de Siembra Directa (SSD) ha permitido la adopción de otras “Buenas Prácticas Agronómicas” como ser: Respetar tiempos de barbecho con cobertura de abono verde; Asegurar que los rastrojos de los cultivos no tengan otro uso que el de aportar materia orgánica al suelo; Eliminar como práctica el pastoreo sobre los abonos verdes; Evitar períodos de suelo descubierto; Asegurar el de rotaciones con cultivos que aporten mayor cantidad de rastrojos como materia orgánica; Reducir operaciones mecanizadas; y ser más eficientes en las prácticas de fertilización.
Estos “CAMBIOS y SUSTITUCIÓN”
en los sistemas de producción en el uso y manejo más racional de los “Suelos
Agrícolas” con el Sistema de Siembra Directa (SSD) ha logrado si número de beneficios
en las unidades productivas de los productores agrícolas como a la propia salud
de los recursos naturales productivos de los suelos agrícolas y por consecuente
a la productividad, producción, la economía y el medio ambiente del sector
agro-rural del país.
Entre los beneficios a la salud de
los suelos agrícolas por el Sistema de Siembra Directa (SSD) son el haber controlado
la erosión hídrica, brindado mayor disponibilidad de las aguas de lluvia para
los cultivos, mayor eficiencia en el uso de fertilizantes, se logró un uso más
eficiente, racional y seguro de los productos fitosanitarios y principalmente,
contribuido significativamente al balance positivo del “Secuestro, Captura o
Absorción y el Almacenamiento del CO2 (Dióxido de Carbono)” en los sistemas
de producción; y así contribuir con el “Balance Positivo del CO2 (Dióxido de
Carbono)” por el mejoramiento del contenido de materia orgánica de los
suelos y siendo actualmente una de las mejores estrategias mitigar la reducción
de las emisiones de Gases Efectos Invernaderos (GEI) causantes del Cambio
Climático.
El aumento de la “MATERIA
ORGÁNICA” en los suelos agrícolas por el aporte de las rotaciones de
cultivos con los abonos verdes, los rastrojos del cultivo anterior, la rotación
con especies con relación Carbono/Nitrógeno y sistemas radiculares
diferenciados ha permitido una mayor acumulación del carbono en estos suelos;
nuestros suelos agrícolas de origen tropicales y subtropicales son generalmente
ácidos, obligando al uso de enmiendas (cal agrícola o yeso) ayudan no solo a
regular la acidez del suelo, sino que permite un mayor desarrollo de las
plantas, que a través de sus raíces y rastrojos hacen que los cultivos aporten
suficiente biomasa al suelo haciendo que el balance de carbono sea positivo a
través del tiempo.
Es claro que el Sistema de Siembra
Directa (SSD) adiciona una biomasa diversificada aumentando la salud y la vida
de los suelos agrícolas, asegurando los agregados superficiales, la
disponibilidad los nutrientes y reduciendo la tasa de oxidación del carbono,
mejorando la fertilidad del suelo, su capacidad productiva. El cambio generalizado producción agrícola de
la labranza convencional a la conservacionista modifico todo el sistema de
manejo del suelo y lo transformó de una fuente de “Emisión de Carbono Atmosférico”,
a un depósito de carbono orgánico.
En conclusión, en modelo de “Agricultura
de Conservación de Paraguay” practicado hace más de 3 (tres) décadas en la
Región Oriental del país con sistemas de producción aplicando adecuadamente el
Sistema de Siembra Directa (SSD) presenta una participación mínima en las emisiones
de Gases de Efecto Invernadero (GEI) a nivel global, es más estudios de
recuperación de carbono demuestran que los sistemas productivos con el Sistema
de Siembra Directa (SSD), son ambientalmente sustentables y que el país está en
proceso de demostrar que no solo no es emisor, sino que es un sumidero de
carbono en sus agroecosistemas de uso agrícola.
Bibliografía Consultada:
Sustainable food systems. Concept
and framework. FAO 2018
Derpsch, R., Florentín, M.A.,
Moriya K. Importancia de la siembra directa para alcanzar la sustentabilidad
agrícola. Proyecto Conservación de Suelos MAG -GTZ, DEAG, San Lorenzo,
Paraguay, 40 pp 2000
Vallejos, F., Kliewer, I.,
Florentín, M.A., Casaccia,J.,Calegari,A., Derpsch, R. Abonos verdes y rotación
de cultivos en siembra directa. Sistemas de producción tractorizados. In:
Proyecto Conservación de Suelos MAG -GTZ, DEAG, Paraguay, 85p.2001.
Cámara Paraguaya de Exportadores y
Comercializadores de Cereales y Oleaginosas www.capeco.org.py
Instituto de Biotecnologia Agrícola
(INBIO). Paraguay. https://www.inbio.org.py
Ernesto Viglizzo. Instituto de
investigaciones en ciencias de la tierra y el ambiente productivo
(CONICET/INCITAP). Investigador científico Instituto Nacional Tecnología
Agropecuaria (INTA).
Agriculture, Ecosystems,
Environment. Inagaki, Sá, Caires, et al., 2016.
Instituto Desarrollo (ID), Unión de
Gremios de la Producción (UGP) (2013). Propuestas para un sector productivo
competitivo e inclusivo: Un instrumento de dialogo y construcción de consensos
para el desarrollo rural e integral. Paraguay
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.