23 feb 2014

Cuenca del Capiibary no está contaminada, según revela estudio

23 de febrero de 2014, 01:00
Cuenca del Capiibary no está contaminada, según revela estudio
Sin contaminación. Un cartel de la gobernación de Itapúa y la Seam señala el resultado.

Se hicieron análisis del agua en Alemania, donde concluyeron que no hay residuos de agrotóxicos a pesar de la gran producción sojera en el área. Los productores envían su apoyo al ministro de Agricultura.

Imprimir Agrandar Achicar
Por Narciso Meza
HOHENAU
Tras estudios realizados en la ciudad de Berlín, en Alemania, se pudo corroborar que la cuenca del arroyo Capiibary, de 97.000 hectáreas, no está contaminada de agroquímicos.
El área se encuentra en el centro del Departamento de Itapúa y dentro de la ella están afectados 10 municipios que tienen unas 30.000 hectáreas de cultivos de soja en toda la cuenca.
Los análisis laboratoriales fueron hechos a instancias del Consejo de Agua de la Cuenca Hídrica del Arroyo Capiibary (Cachac) en la ciudad alemana y costaron más de 10.000 euros. Este monto fue financiado por el proyecto Manejo Sostenible y Protección de Aguas Subterráneas en Paraguay.
Los estudios se llevaron a cabo sobre la base de siete muestras extraídas de pozos artesianos y tres arroyos integrantes de la cuenca.
En todos los casos, los resultados dieron cero contaminación de agroquímicos.
"Es importante que se sepa este resultado porque es una superficie productiva donde tenemos cerca de 30.000 hectáreas de cultivos intensivos que son manejados con la utilización de agroquímicos. Es el resultado de una tarea de recuperación del arroyo que venimos realizando desde hace varios años", dijo Nelson Tucholke, presidente del Cachac.
Tucholke insistió en que realmente sorprende porque "sabemos que se utilizan desde hace décadas agroquímicos, pero también queríamos ver pruebas científicas para estar seguros de que en la cuenca se tiene un manejo correcto del uso de los agroquímicos", dijo.
apoyo. Señaló que los productores del Departamento de Itapúa envían su apoyo al ministro de Agricultura y Ganadería, Jorge Gattini, a quien los integrantes de la Federación Nacional Campesina (FNC) repudiaron en una manifestación.
Los resultados fueron dados a conocer en un momento en que existe una fuerte controversia sobre el uso indiscriminado del glifosato, cuestionado por sectores campesinos y defendidos por los exponentes de la agricultura empresarial.
De las 97.000 hectáreas, 70.000 son empleadas en la actividad agropecuaria alrededor del extenso arroyo. "Son fincas productivas cuyos propietarios son responsables, además son socios de la cooperativa Colonias Unidas que son asistidos técnicamente en el uso de agroquímicos", explicó el productor de la zona de Itapúa.
Para recuperar el arroyo Capiibary y sus afluentes, desde hace años el Cachac viene promoviendo las barreras vivas, para prevenir la erosión y contaminación, el mantenimiento y rediseño de caminos vecinales, para evitar arrastre de material sólido y la colmatación de los arroyos.
"También venimos realizando la protección y rediseños de pozos artesianos y abastecedores comunitarios para evitar la contaminación biológica y química, además de la adecuación de vertederos municipales y eliminación de vertederos clandestinos para proteger las aguas subterráneas por efecto de la infiltración de agentes contaminantes superficiales", indicó el titular de Cachac.
Los municipios, cuyos territorios están afectados por la cuenca, sancionan y aplican rigurosas ordenanzas en favor de la no contaminación de los cauces.
Igualmente, la Gobernación de Itapúa sancionó importantes normativas para la protección.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Medio Ambiente

El medio ambiente debe ser considerado como parte integral y armónica del conjunto de tareas que garanticen el desarrollo sostenible de un país como Paraguay (Molinas 2006).

El problema de la sostenibilidad es en el fondo un problema de desarrollo, de erradicación de la pobreza, de educación colectiva, de mentalidad y hábitos sociales, de cultura política, de mecanismos institucionales que incorporen la participación de la sociedad civil en la toma de decisiones, de nuevas formas de producir y de consumir, de equidad y cooperación en las relaciones internacionales, se trata, en suma, de colocar al ser humano en el centro de nuestras preocupaciones, porque si las personas no están protegidas, la naturaleza tendrá, entonces, pocas oportunidades.

Para avanzar verdaderamente hacia el desarrollo sostenible debemos asumir nuestra responsabilidad local con enfoque global en la lucha que la humanidad esta encarando por preservar en el largo plazo los ciclos vitales de la vida de los que depende la existencia misma del ser humano sobre la tierra, debemos hacer un esfuerzo local con perspectiva global (Molinas 2008).

Anuncio Ing. Alfredo Molinas