Ing. Agr. (M.Sc.) Alfredo Silvio Molinas Maldonado; Asesor Agroambiental Especializado de la Unión de Gremios de la Producción (UGP) y de la Presidencia de la Universidad San Carlos (USC) – Creo conveniente poner a conocimiento de los visitantes de este BLOG el contenido del “PLAN ESTRATEGICO INTITUCIONAL 2021 – 2023”, ACTUALIZADO MINISTERIO DE AGRICULTURA Y GANADERÍA (MAG) – ELABORADO POR LA DIRECCIÓN GENERAL DE PLANIFICACIÓN (DGP) JUNIO, 2021.
Como Asesor Agro-ambiental Especializado
de la Unión de Gremios de la Producción (UGP) y de la Presidencia de la Universidad
San Carlos (USC); no me queda más que felicitar al Ministro de Agricultura y
Ganadería el Ing. Agr. Santiago Bertoni Hicar y para todos aquellos que elaboraron y
asumieron la responsabilidad institucional ha tan importante y adecuado
documento oficial sobre el “PLAN ESTRATÉGICO INSTITUCIONAL 2021 – 2023,
ACTUALIZADO DEL MINISTERIO DE AGRICULTURA Y GANADERÍA (MAG) DE PARAGUAY”, con
este material actualizado se podrá entender, comprender y acompañar la gestión
política, técnica e institucional actual del Ministerio de Agricultura y
Ganadería (MAG) para con el sector agro-rural del Paraguay por este Periodo
2021 a 2023. A continuación, se presenta parte del material publicado
oficialmente, pero que se presenta en forma inextenso en las paginas oficiales
del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) de Paraguay para su revisión y
consulta.
PRESENTACIÓN:
El Ministerio de Agricultura y Ganadería
presenta el Plan Estratégico Institucional 2021 –2023; el mismo representa un
documento actualizado del PEI 2019 –2023, el cual fue sometido a un proceso de
revisión y ajustes en respuesta al nuevo escenario causado por los efectos y
desafíos de la pandemia Covid-19, así como de otros factores, tanto internos
como externos de fundamental trascendencia para el accionar institucional.
Este proceso de actualización ha
significado además una oportunidad de mejora y aprendizaje conjunto, entre los
referentes planificadores de cada dependencia y el equipo técnico de la
Dirección General de Planificación, en el cual, a partir de la experiencia
cotidiana y en base a la capacidad institucional, han sido ajustadas o
redefinidas ciertas acciones, con el fin de avanzar, de manera paulatina y
ordenada, hacia el cumplimiento del propósito institucional.
El PEI 2021 – 2023, Actualizado, se
instituye como el principal instrumento orientador de la gestión del MAG,
debiendo el funcionariado, asumir el compromiso fehaciente de enfocar los
diferentes esfuerzos y recursos institucionales para la concreción efectiva de
las metas trazadas. El mismo se constituye además en una invitación a la
reflexión constante en cuanto al desempeño institucional, instalando una
cultura de mejora continua, que nos permita construir conjuntamente una nueva
Institución de Excelencia y Liderazgo dentro del sector agrario nacional.
I.- INTRODUCCIÓN:
El Plan Estratégico
Institucional – PEI, permite analizar con detalle la institución y el contexto en el cual se desenvuelve para, a partir de esto, establecer los lineamientos a
seguir en torno al logro de los fines y propósitos buscados. En este sentido,
define las aportaciones que la institución brindará a su clientela y la forma
de organizar y distribuir los recursos y esfuerzos para producir dichas
aportaciones.
El PEI 2019 – 2023 fue
elaborado de manera participativa, con actores institucionales, así como
referentes claves del sector agrario. El mismo representa el principal
instrumento de gestión del Ministerio de Agricultura y Ganadería en el corto y
mediano plazo, direccionando el accionar de la institución y la inversión
pública para los próximos años.
Sin embargo ante la
sucesión de factores internos, durante el primer periodo de su vigencia, como
la asunción de una nueva autoridad al frente del Ministerio, la incorporación
del Viceministerio de la Agricultura Familiar a la estructura orgánica
institucional, se ha identificado la necesidad de realizar ciertos ajustes al
instrumento, en procura de su alineación al instrumento institucional de
planificación sectorial de largo plazo, el MPSA2030, así como a nivel extra
sectorial y nacional, al PND2030, e internacional, a los ODS, y a la misma
situación de Pandemia actual.
En este sentido, se ha
realizado el proceso, estableciendo arreglos en la definición de la Visión,
Misión y los Objetivos Estratégicos, los cuales, si bien han sufrido cambios en cuanto a la redacción, los mismos se mantienen inalterables teniendo en cuenta
los propósitos identificados inicialmente, destacando algunos aspectos
considerados trascendentes para el logro de los cambios planteados. Además, se
ha procedido a realizar ajustes en la definición, establecimiento o disposición
de ciertas acciones e indicadores.
Partiendo de una visión sistémica en la cual se analizan los diferentes ámbitos del accionar institucional, se contemplan tres Objetivos Estratégicos; el Objetivo Estratégico 1: Gestión Institucional con recursos humanos motivados, procesos internos ajustados y tecnología adecuada, que enfoca su mirada al interior de la institución, aunque siempre en función a la mejora de las condiciones institucionales que posibiliten una mejor provisión de bienes y servicios.
Conforme a los antecedentes disponibles, la oficialización del PEI 2019-2023, en virtud de la Resolución MAG N°691 de diciembre de 2019, se producía exactamente en las puertas de la profunda crisis que a principios del 2020 comenzaba a afectar a todo el Planeta, crisis de la cual el Paraguay no ha estado ausente ni mucho menos. Diversas variables del contexto interno y global recibieron desde entonces notorios impactos y, por sí solas justifican la actual revisión del Plan.
Gráfico
1: Evolución del PIB por habitante en Dólares corrientes
Otro de los ámbitos en
los que se observa reflejado el impacto de la crisis económica a nivel país es
en las cuentas públicas de la Administración Central. El Gráfico 2 muestra cómo
el equilibrio fiscal celosamente conservado entre los años 2003 y 2019 es
reemplazado por un pronunciado déficit entre las recaudaciones totales y los
gastos totales en el año 2020. La magnitud del déficit registra un monto de
6.130 miles de millones de guaraníes.
La referida brecha en las cuentas fiscales, además de las demandas incrementales de recursos provocadas por la situación sanitaria nacional, han sido las causantes inmediatas de la aceleración adquirida por la cuenta de endeudamiento público en el mencionado año. De esta manera el saldo de la deuda pública externa aumentó en 2,95 mil millones de dólares entre diciembre de 2019 (7.229.396 millones) y 2020 (10.182.196 millones)1.
Gráfico
2: Paraguay: Evolución de la Ejecución Presupuestaria de la Administración
Central 2003-2020
Lo anterior contribuye a
acrecentar las condiciones de vulnerabilidad del sistema económico nacional en
momentos en que existen notorias necesidades de inversión en sectores tales
como salud, educación, infraestructura, así como la promoción de la agricultura
familiar, como se verá más abajo.
La reciente promulgación
y reglamentación de la Ley N°6286 de Defensa, restauración y promoción en la
agricultura familiar campesina en Paraguay constituye otro hito que modifica el
escenario previo a la preparación original del PEI 2019-2023. El mencionado
instrumento legal define para la Institución nuevos desafíos y oportunidades
para trabajar por la disminución de la brecha de desarrollo existente en
virtud de la dualidad estructural en el sector.
a.- La Política
Sectorial Agropecuaria (PSA) en retrospectiva
En el año 2018 se
completaba el periodo de vigencia del documento titulado Marco Estratégico Agrario y, por iniciativa del Ministerio de Agricultura y Ganadería, a cuyo
cargo estaban asignadas las tareas de seguimiento y facilitación, se procedió a
la revisión de las principales tendencias verificadas durante el referido
periodo de vigencia con algunas variables asociadas a los ámbitos de gestión
contemplados en el documento.
La revisión que fue
conducida a través de un proceso que contó con la participación del personal
técnico del Ministerio, de las entidades autárquicas del sector agrario, así
como de los gremios y asociaciones de la producción, permitió reconocer algunas
variables como; la evolución del PIB agrario, que había registrado tendencias
de crecimiento sostenido, y otras, que no habían tenido una evolución tan
favorable, tales como la permanencia de la marcada dualidad en términos de
productividad e ingresos, la incidencia y escasa variación de la pobreza rural,
y la persistencia de las tasas de emigración desde el campo hacia la ciudad,
reflejada en los diferenciales de tasas de crecimiento demográfico entre el
área rural y urbana.
Naturalmente que, parte
de dichas tendencias de signo insuficiente exceden las competencias institucionales directas del Ministerio de Agricultura y Ganadería, ya que las
leyes promulgadas en el pasado reciente creando las autarquías, varias de
ellas como desmembración directa del propio MAG, las han transferido como
ámbitos de competencia de las nuevas entidades creadas.
Sin embargo, el carácter
de Ente Rector de la Política Agraria, que al MAG le asigna su propia Ley
N°81/92, hace que en forma generalizada los actores consultados durante la
revisión destacaran, entre otros, como factores determinantes de los logros
incompletos, al bajo nivel de cohesión y coordinación de la institucionalidad
agraria, a la debilidad del liderazgo del Ministerio de Agricultura y
Ganadería, a la sistemática disociación entre las decisiones políticas y las
consideraciones técnicas pertinentes a las problemáticas sectoriales
(disociación que se traduce en problemas de asignación de recursos en niveles
programáticos y territoriales), y al excesivo centralismo en el manejo de los
recursos, el cual ha llegado a trasladar la gestión a las administraciones
centrales, dejando a las dependencias operativas con mínimas capacidades de
control sobre sus recursos presupuestarios.
Posteriormente, en el año
2019, las conclusiones extraídas durante la etapa de preparación del nuevo
Marco de Políticas Sectoriales Agrarias 2020-2030, incluyeron entre otras: el
país destina al Gasto Público Sectorial -referido al sector agrario ampliado –
una baja proporción de los recursos, tanto respecto del PIB como del valor de
las exportaciones; en el periodo 2012-2018, las acciones dirigidas a la AFC
absorben aproximadamente el 50% del gasto sectorial, en particular del MAG;
los gastos destinados a información, sanidad y parte de investigación,
destinados a la agricultura en general, representan otra proporción importante
del gasto sectorial; y el crédito externo representa una proporción importante
en la estructura de financiamiento del gasto público sectorial.
Uno de los puntos trascendentes
incluidos entre las recomendaciones del proceso de preparación se relaciona
con la necesidad de someter a evaluación tanto la tipología del gasto ejecutado
como el impacto logrado en los ingresos de la AFC, tomando en consideración que
entre los años 2012 y 2018 fueron destinados a los programas y proyectos
dirigidos a la AFC una suma total de US$ 646 millones, equivalentes a una media
de US$ 92 millones al año.
b.- Evolución reciente
de la actividad sectorial
En el referido trabajo de
preparación de la actualización del documento de política sectorial agraria
(MPSA)3 fue puesto de resalto en
el diagnóstico que el sector agropecuario y forestal ampliado tiene una ponderación media muy cercana
al 25% del PIB global en el periodo 2008-2017, comportamiento sostenidamente
expansivo que ha tenido, tanto la economía paraguaya en general y los ingresos
medios a nivel nacional, como la actividad agraria y el sector exportador de
bienes agropecuarios y derivados, en particular.
El documento destaca por
otro lado que “diagnósticos recientes también alertan respecto de los límites
de un estilo de desarrollo basado en la explotación de recursos naturales, que,
en plazos cercanos, podrían mostrar su agotamiento”.
c.- Propuestas de
políticas para el sector
El trabajo de diseño en
este nivel sectorial contiene recomendaciones referidas entre otras cosas con
la continuidad de los impulsos a la competitividad del sector agropecuario y forestal,
la realización de gestiones orientadas a incorporar la agroindustria en la
política sectorial, el fortalecimiento del liderazgo del Ministerio de
Agricultura y Ganadería como actor institucional, asumiendo desde el Estado el
rol de conducción del marco de políticas sectoriales y de coordinación
interinstitucional de cara al logro de los objetivos del desarrollo agrario y
rural.
Al centrar la prioridad
sobre la competitividad, identifica y desarrolla lineamientos de política en
cuatro ejes, que se relacionan con variables incidentes principales: i) mejorar
la condición como para optimizar la gestión de los recursos productivos,
ii) desarrollar mercados competitivos iii) desarrollar actividades que
impliquen modernizar y proyectar las instituciones públicas responsables
de su implementación y iv) orientar esfuerzos hacia el cuidado y
fortalecimiento de los recursos en los que se asienta el desarrollo
productivo.
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